El cardo mariano, también conocido como silimarina, es una planta medicinal conocida por sus numerosas propiedades y beneficios para la salud. Originario de la región mediterránea, el cardo mariano ha sido utilizado durante siglos como remedio natural para tratar diversas dolencias.
En este artículo, vamos a explorar las propiedades medicinales del cardo mariano, sus beneficios para el organismo y los usos más comunes de esta planta.
¿Qué es y para qué sirve el cardo mariano?
El cardo mariano es conocido principalmente por su capacidad para proteger y fortalecer el hígado.
La silimarina tiene propiedades hepatoprotectoras, lo que significa que sirve para proteger las células del hígado de daños causados por sustancias tóxicas, como el alcohol, los medicamentos, los productos químicos y las toxinas ambientales. También estimula la regeneración de las células hepáticas dañadas.
Propiedades del Cardo Mariano
El cardo mariano (Silybum marianum) contiene una sustancia activa conocida como silimarina, que es responsable de muchas de sus propiedades medicinales. Estas son algunas de las propiedades destacadas del cardo mariano:
Hepatoprotector: La silimarina del cardo mariano es conocida por su capacidad para proteger y regenerar las células hepáticas, lo que lo convierte en un potente aliado para la salud del hígado.
Antioxidante: El cardo mariano posee propiedades antioxidantes, lo que significa que ayuda a neutralizar los radicales libres y protege a las células del daño oxidativo.
Antiinflamatorio: La silimarina también exhibe propiedades antiinflamatorias, lo que puede ser beneficioso para aliviar la inflamación en diferentes partes del cuerpo.
Detoxificante: El cardo mariano estimula la producción de enzimas hepáticas que ayudan en el proceso de desintoxicación del organismo, ayudando a eliminar toxinas y sustancias dañinas.
¿Qué beneficios tiene el cardo mariano?
El consumo regular de cardo mariano puede aportar diversos beneficios para la salud. A continuacion veras algunos de sus beneficios más destacados:
Protección hepática: El cardo mariano es conocido por su capacidad para proteger y mejorar la función del hígado, lo que lo convierte en un apoyo natural para personas con enfermedades hepáticas, como la cirrosis o la hepatitis.
Mejora la salud digestiva: El cardo mariano alivia los trastornos digestivos, como la indigestión, el malestar estomacal, los gases y el síndrome del intestino irritable. Ayuda a estimular la producción de bilis, lo que favorece la digestión y puede aliviar la inflamación en el tracto gastrointestinal.
El cardo mariano tambien sirve para problemas digestivos, como la indigestión, el malestar estomacal y los gases, gracias a su capacidad para estimular la producción de bilis y mejorar la digestión.
Salud cardiovascular: La silimarina del cardo mariano tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que contribuye a la reducción del colesterol LDL («malo») y los triglicéridos en la sangre, ayudando a mantener una buena salud cardiovascular.
Cardo marianoa para desintoxicación del organismo: El cardo mariano estimula la producción de enzimas hepáticas involucradas en el proceso de desintoxicación del cuerpo. Esto ayuda a eliminar toxinas y sustancias dañinas, promoviendo una función hepática saludable.
Protección antioxidante: Gracias a su contenido de antioxidantes, el cardo mariano puede ayudar a proteger al organismo contra el daño celular causado por los radicales libres, lo que puede contribuir a prevenir enfermedades crónicas.
Potencial efecto anticancerígeno: Algunas investigaciones sugieren que la silimarina del cardo mariano puede tener propiedades anticancerígenas al inhibir el crecimiento de células cancerosas y prevenir la formación de tumores en ciertos tipos de cáncer, como el de mama, próstata y colon. Sin embargo, se requieren más estudios para confirmar estos efectos.
¿Cuántas enfermedades cura el cardo mariano?
Si bien el cardo mariano puede tener efectos beneficiosos en el hígado y puede ayudar a mejorar su función, no se considera una cura para enfermedades específicas.
El principal componente activo del cardo mariano es la silimarina, que tiene propiedades hepatoprotectoras, antioxidantes y antiinflamatorias. Estas propiedades pueden ser beneficiosas para afecciones hepáticas, como la cirrosis, la hepatitis, la esteatosis hepática no alcohólica y la lesión hepática inducida por toxinas.
Además de su efecto en el hígado, se han realizado estudios preliminares que sugieren que el cardo mariano y la silimarina tienen efectos beneficiosos en otras áreas de la salud, como la protección cardiovascular, el control de los niveles de colesterol y triglicéridos, y la prevención de ciertos tipos de cáncer. Sin embargo, hacen falta datos concluyentes para respaldar estos posibles beneficios en enfermedades específicas.
Usos del Cardo Mariano
El cardo mariano se puede utilizar de diversas formas para aprovechar sus beneficios. Estos son algunos de los usos más comunes:
Suplementos: Los suplementos de cardo mariano están disponibles en forma de cápsulas, tabletas o extractos líquidos. Estas presentaciones permiten un consumo fácil y dosificado de la silimarina.
Infusión: Preparar una infusión con las semillas de cardo mariano es una forma tradicional de aprovechar sus beneficios. Para ello, puedes agregar una cucharadita de semillas trituradas en agua caliente y dejar reposar durante unos minutos. Luego, cuela y bebe la infusión.
Extracto líquido: El extracto líquido de cardo mariano es otra opción popular. Puede ser utilizado agregando unas gotas en agua u otra bebida para consumirlo.
Cataplasma: El cardo mariano también se puede utilizar externamente en forma de cataplasma. Para ello, se pueden triturar las semillas y mezclarlas con agua tibia hasta formar una pasta. Aplica la pasta sobre la piel y déjala actuar durante unos minutos antes de enjuagar.
¿Qué personas no deben tomar cardo mariano?
Si bien el cardo mariano es considerado seguro para la mayoría de las personas cuando se consume en cantidades adecuadas, existen algunas situaciones en las que se recomienda precaución o evitar su consumo.
Mujeres embarazadas o en período de lactancia: No se dispone de suficiente evidencia sobre la seguridad del cardo mariano durante el embarazo y la lactancia. Por lo tanto, es recomendable evitar su consumo en estas etapas a menos que sea indicado por un médico.
Personas alérgicas a las plantas de la familia de las asteráceas/compositae: El cardo mariano pertenece a la familia de las asteráceas/compositae, al igual que otras plantas como las margaritas, los girasoles y las caléndulas. Aquellos que sean alérgicos a estas plantas pueden tener mayor riesgo de desarrollar reacciones alérgicas al consumir cardo mariano.
Personas con obstrucción de las vías biliares: En casos de obstrucción de las vías biliares, el uso de cardo mariano puede no ser apropiado, ya que puede aumentar la producción de bilis y causar complicaciones.
Personas con enfermedades hormonales sensibles: La silimarina presente en el cardo mariano puede tener un efecto hormonal leve, por lo que se recomienda precaución en personas con enfermedades hormonales sensibles, como el cáncer de mama, ovario, útero o próstata, hasta que se disponga de más evidencia.
¿Que le hace el cardo mariano al hígado?
Protección hepática: La silimarina del cardo mariano tiene propiedades hepatoprotectoras, lo que quiere decir que ayuda a proteger las células del hígado de los daños causados por sustancias tóxicas. La silimarina actúa como un antioxidante, reduciendo el estrés oxidativo y previniendo el daño celular en el hígado. También se sabe que inhibe la formación de radicales libres, que son los que dañan las células hepáticas.
Estimulación de la regeneración celular: El cardo mariano tambien regenera las células hepáticas dañadas. La silimarina ayuda con el crecimiento y la multiplicación de nuevas células hepáticas, lo que favorece la recuperación y el funcionamiento saludable del hígado.
Apoyo en enfermedades hepáticas: El cardo mariano se ha utilizado tradicionalmente como un apoyo natural para diversas enfermedades hepáticas, como la cirrosis, la hepatitis y la esteatosis hepática no alcohólica. La silimarina puede ayudar a mejorar la función hepática, reducir la inflamación y promover la desintoxicación del hígado.
Estabilización de las membranas celulares: La silimarina del cardo mariano puede fortalecer las membranas celulares del hígado, lo que contribuye a su integridad y protección contra daños. Esto ayuda a mantener la estructura y función adecuada de las células hepáticas.
¿Cuándo se debe de tomar el cardo mariano?
Durante o después de las comidas: Si estás tomando suplementos de cardo mariano en forma de cápsulas, tabletas o extracto líquido, se recomienda generalmente tomarlos durante o después de las comidas. Esto puede ayudar a mejorar la absorción de los componentes activos y reducir cualquier malestar estomacal potencial.
En caso de afecciones hepáticas: Si estás utilizando el cardo mariano para apoyar la salud del hígado o tratar afecciones hepáticas, puedes tomarlo según las indicaciones de tu médico o profesional de la salud. Es posible que se te recomiende dividir la dosis diaria en varias tomas a lo largo del día para mantener niveles constantes de los componentes activos en tu organismo.
Según las indicaciones del producto: Si estás utilizando una presentación específica de cardo mariano, como una infusión o un cataplasma, sigue las instrucciones proporcionadas por el fabricante o las recomendaciones de tu médico en cuanto a cuándo y cómo tomarlo.